Xerostomía o sequedad bucal en personas mayores

Xerostomía o sequedad bucal en personas mayores

13 diciembre, 2021 0 Por dropharma_admin

La segregación de saliva debe ser correcta para que nuestra cavidad bucal se mantenga en buen estado, sin embargo, hay personas que por diferentes motivos pueden experimentar una reducción de su producción, dando lugar a lo que se conoce como xerostomía o síndrome de la boca seca. Las personas mayores (las mujeres incluso antes de llegar a los 60 años) suelen tener este problema de sequedad bucal porque sus glándulas salivares no son capaces de producir la suficiente saliva que se necesita.

La saliva es una sustancia que segregan las glándulas salivares mayores y menores de la boca, que al cabo del día pueden llegar a producir 1,5 litros. Cuando olemos, vemos o pensamos en comida aumenta más la producción, y de ahí las típicas ilustraciones que muestran a alguien babeando mientras contempla un enorme trozo de tarta.Entre los 15 y los 30 años es cuando nuestras glándulas salivares producen mayor cantidad de saliva, y los hombres son quienes más tienen porque el tamaño de sus glándulas es mayor. En ellos la ausencia de saliva no suele surgir (si no hay problemas previos relacionados) hasta los 70 años, en cambio en las mujeres la producción comienza a reducirse con la llegada de la menopausia debido a los cambios hormonales que experimentan.

Causas del síndrome de boca seca en la tercera edad

El síndrome de boca seca es frecuente entre los mayores, ya que es a partir de los 70 años cuando los hombres experimentan un descenso de la producción de saliva, y en las mujeres a la llegada de la menopausia. Sin embargo, existen otras causas de xerostomía por las que este problema se asocia a la tercera edad (aunque también puede aparecer en personas más jóvenes):

Consumo de bebidas alcohólicas y tabaco

Estos dos hábitos nocivos también reducen la producción de saliva.Problemas que provoca la sequedad de boca en los mayores

La xerostomía o síndrome de la boca seca, frecuente en los adultos mayores, puede tener consecuencias negativas sobre su salud y bienestar. Necesitamos la saliva para que nuestro sistema digestivo funcione correctamente y para que nuestra salud bucodental sea buena, ya que sin ella pueden surgir los siguientes problemas:

  • Dificultades para masticar y tragar: la saliva es fundamental durante la masticación; de hecho, es en el momento que se mastica y se segrega saliva cuando comienza la digestión de los hidratos de carbono. Además, sin saliva los alimentos se pegan en los tejidos de la boca y resulta más difícil tragarlos.
  • Caries e infecciones: la saliva contiene sustancias antimicrobianas que evitan la aparición de caries en los dientes e infecciones en las encías.
  • Desequilibrio del pH: gracias a la saliva, el pH de la boca se mantiene estable después de ingerir alimentos.
  • Problemas en el mantenimiento de los tejidos: la saliva favorece la reparación de los tejidos de la cavidad bucal.
  • Problemas de habla: sin saliva, la cavidad bucal no está bien lubricada y por tanto resulta más difícil vocalizar.Mala percepción de los sabores: sin saliva, no se perciben correctamente los sabores de los alimentos, de hecho solo se mantiene la percepción de los picantes.
  • Fisuras en los labios: el no tener saliva conlleva que se resequen los labios y aparezcan fisuras.
  • Aparición de aftas bucales y cándidas: la saliva evita que se produzcan infecciones y la propagación de hongos en la boca.
  • Halitosis: la ausencia de saliva favorece el mal sabor y olor de boca.
  • Problemas con la prótesis dental: la falta de saliva dificulta la adherencia de la prótesis, lo que puede originar problemas para hablar y masticar, y un malestar continuo que en muchas ocasiones lleva a los portadores a quitarse la prótesis, con todo lo que esto conlleva.

Todos estos problemas relativos a la xerostomía pueden llevar a una persona mayor a una situación peligrosa para su salud, originando estados de malnutrición, aislamiento, infecciones mal tratadas, irritabilidad, ansiedadfalta de autoestima, etcétera.

Soluciones a la xerostomía: cómo evitar tener la boca seca

La sequedad bucal o xerostomía es muy molesta, especialmente en la tercera edad, y para reducir o prevenir sus efectos el primer paso es acudir a las revisiones con el odontólogo, ya que es el profesional sanitario que puede percibir problemas en la cavidad bucal que pueden pasar desapercibidos para el mayor. Él será quien indique las pautas a seguir, incluyendo las medidas higiénicas necesarias para favorecer la producción de saliva.

A sus indicaciones podemos sumarles estos consejos para solucionar el síndrome de la boca seca:

  • Comer despacio, masticando bien los alimentos para que las glándulas segreguen mayor cantidad de saliva.
  • Beber agua a lo largo de todo el día; se recomienda entre 1,5 y 2 litros.
  • Evitar los refrescos azucarados, así como los caramelos, y es que, aunque el consumo de estos últimos puede parecer que ayuda a tener más saliva, su efecto es contraproducente, porque cuando hay poca saliva en la boca, las partículas del azúcar atacan al esmalte de los dientes rápidamente.
  • Se pueden masticar chicles sin azúcar para estimular la producción de saliva, eso sí, solo en situaciones puntuales (cuidado quienes usan prótesis dentales).
  • Existen diferentes productos que actúan como sustitutos de la saliva, como son espráis, geles orales, pastillas y productos de higiene oral.

La sequedad bucal o xerostomía es muy molesta, especialmente en la tercera edad, y para reducir o prevenir sus efectos el primer paso es acudir a las revisiones con el odontólogo, ya que es el profesional sanitario que puede percibir problemas en la cavidad bucal que pueden pasar desapercibidos para el mayor. Él será quien indique las pautas a seguir, incluyendo las medidas higiénicas necesarias para favorecer la producción de saliva.

A sus indicaciones podemos sumarles estos consejos para solucionar el síndrome de la boca seca:

  • Comer despacio, masticando bien los alimentos para que las glándulas segreguen mayor cantidad de saliva.
  • Beber agua a lo largo de todo el día; se recomienda entre 1,5 y 2 litros.
  • Evitar los refrescos azucarados, así como los caramelos, y es que, aunque el consumo de estos últimos puede parecer que ayuda a tener más saliva, su efecto es contraproducente, porque cuando hay poca saliva en la boca, las partículas del azúcar atacan al esmalte de los dientes rápidamente.
  • Se pueden masticar chicles sin azúcar para estimular la producción de saliva, eso sí, solo en situaciones puntuales (cuidado quienes usan prótesis dentales).
  • Existen diferentes productos que actúan como sustitutos de la saliva, como son espráis, geles orales, pastillas y productos de higiene oral.