Estreñimiento

Estreñimiento

11 octubre, 2023 0 Por dropharma_admin

Una dieta pobre en fibra, un escaso consumo de líquidos, el embarazo, el estrés, el sedentarismo… Todos estos factores pueden provocar estreñimiento. Te enseñamos cómo evitar este trastorno tan molesto.

Qué es el estreñimiento

El estreñimiento es un retraso del vaciado intestinal, con pocas heces y duras, debido a un enlentecimiento del tránsito intestinal (peristaltismo intestinal). Se caracteriza por la presencia de flatulencia (gases) y, en determinados casos, dolor abdominal. El estreñimiento es una incapacidad puntual para evacuar el contenido intestinal tras 10 minutos de esfuerzo, o la ausencia de deposiciones durante tres días o más. 

Es difícil definir esta situación, pues puede considerarse normal entre tres deposiciones semanales y tres deposiciones diarias. En general se acepta que el estreñimiento conlleva menos volumen de heces, más esfuerzo para evacuarlas, más dureza de las mismas, sensación de evacuación incompleta o ausencia del deseo de defecar.

Se trata de un problema muy común por el que se consulta con mucha frecuencia al médico general, con una prevalencia entre el 2% y el 30% de la población, según estiman los expertos en gastroenterología. Es un problema particularmente frecuente en niños y ancianos, y en el resto de etapas es claramente más habitual en mujeres, incluidas las embarazadas.

Tipos de estreñimiento

Existen principalmente tres tipos de estreñimiento:

  • Estreñimiento agudo: de aparición repentina, ocasionado por algún cambio reciente (un nuevo tratamiento médico, problemas de estrés, embarazo…), y que finaliza al solucionar el agente causal. No suele precisar tratamiento porque desaparece una vez controlado el agente causal, sin recaídas posteriores. Es el tipo más frecuente de estreñimiento en la población infantil.
  • Estreñimiento crónico: origen definido y lejano en el tiempo, con recaídas frecuentes. Suele ser habitual en adultos y ancianos.
  • Estreñimiento idiopático: origen desconocido y tratamiento poco determinado, con eficacia comprometida.

Desde un punto de vista médico, cabe distinguir:

  • El estreñimiento funcional, que podría corresponder a una alteración del peristaltismo, a una disminución de la ingesta de líquidos, a una situación de sedentarismo…,
  • El estreñimiento orgánico, como síntoma de alguna enfermedad gastrointestinal como obstrucciones, tumores, hernias, etcétera.

  • Causas del estreñimiento

Las principales causas del estreñimiento son:

  • Estilo de vida inadecuado, caracterizado por:
    • Dieta pobre en fibra: la falta de fibra en la dieta es una causa principal del estreñimiento. La fibra dietética, que se encuentra en alimentos como frutas, verduras, granos enteros y legumbres, agrega volumen y suavidad a las heces, facilitando su paso a través del intestino.
    • Ingesta insuficiente de líquidos: la deshidratación o un consumo inferior de agua del recomendado puede contribuir al estreñimiento, ya que el intestino grueso puede absorber más agua de las heces, lo que las hace más duras y difíciles de pasar. Una ingesta adecuada de líquidos es esencial para mantener las heces blandas, que debe ser preferiblemente agua, ya que las bebidas con gas o cafeína (café…) pueden provocar alteraciones del tránsito intestinal. 
    • Poco o ningún ejercicio físico: la falta de actividad física regular y el sedentarismo pueden ralentizar el tránsito intestinal y contribuir al estreñimiento, mientras que el ejercicio regular ayuda a estimular el movimiento intestinal. No es necesario realizar un ejercicio intenso y prolongado para prevenir el estreñimiento, basta con 20-30 minutos de paseo a ritmo normal para favorecer unos adecuados hábitos intestinales. 
    • Estrés: surir estrés crónico puede alterar la motilidad o movimiento normal del intestino. Esto puede ralentizar el tránsito de las heces a través del colon, lo que resulta en heces más secas y duras, lo que a su vez dificulta su paso y causa estreñimiento. Por otro lado, cuando estamos en situaciones de estrés nuestro shábitos alimentarios pueden verse afectados, así como llevr a una reducción de la actividad física.
    • Ignorar el impulso de defecar: retener las ganas de defecar puede llevar al estreñimiento, ya que las heces pueden volver a ser absorbidas en el intestino, lo que las hace más difíciles de expulsar.
    • Cambios en la rutina diaria: alteraciones en nuestro día a día habitual, como viajar, o determiandas situaciones extaordinarias pueden afectar los hábitos intestinales y causar estreñimiento temporal.
  • Presencia de ciertas afecciones relacionadas con el intestino como: engrosamiento de la pared intestinal, inflamación, presencia tumoral, síndrome de intestino irritable… Si el estreñimiento es debido a alguna de estas causas, no se debe iniciar ningún tratamiento sin consultar con un médico, pues el uso de laxantes naturales o medicamentos podría enmascarar la enfermedad y agravarla.
  • Hipotiroidismo diabetes. En estos casos, el estreñimiento aparece como un síntoma de estas enfermedades que no están directamente relacionadas con el intestino, o bien se manifiesta como efecto secundario de algún medicamento. Es conveniente acudir al especialista que esté realizando el seguimiento de la diabetes o hipotiroidismo, para que estudie y valore el problema.PUBLICIDAD
  • Enfermedades neurológicas: las personas con demencia, párkinsonesclerosis múltipleictus… pueden presentar un estreñimiento por afectación secundaria del sistema nervioso encargado de la función intestinal. Lesiones en la médula espinal también pueden afectar el funcionamiento de los músculos intestinales y derivar en estreñimiento crónico.
  • Embarazo: el estreñimiento es relativamente común durante el embarazo y puede atribuirse a varias razones relacionadas con los cambios hormonales y físicos que ocurren en el cuerpo de una mujer embarazada. Así, aumentan significativamente los niveles de hormonas como la progesterona, que relaja los músculos lisos del cuerpo, incluyendo los del tracto gastrointestinal, lo que puede ralentizar el movimiento de los alimentos a través del intestino, y dar como resultado una digestión más lenta y heces más duras y secas. Por otro lado, la expansión del útero puede ejercer presión sobre el intestino, lo que dificulta el movimiento normal de las heces a través del colon. El uso de suplementos de hierro en esta etapa o cambios en la dieta puede incrementar también el riesgo de estreñimiento en las gestantes.
  • Senectud: a medida que las personas envejecen, es posible que experimenten cambios en la función intestinal que aumenten el riesgo de estreñimiento.
  • Uso de ciertos medicamentos: muy comunes los analgésicos opioides como el tramadol, fentanilo, buprenorfina, morfina, etcétera. Otros como los antiácidos, antidepresivos y algunos medicamentos para la hipertensión arterial y ciertos suplementos de hierro pueden causar estreñimiento como efecto secundario.

Síntomas del estreñimiento

El estreñimiento en sí es un síntoma si forma parte de alguna enfermedad como estreñimiento orgánico. No obstante, la presencia de esta situación debe ser investigada por el médico para intentar llegar a la causa última del estreñimiento.

El paciente suele referir de formas diversas este problema. Así, como síntomas del estreñimiento más habituales puede describir que su evacuación de heces es menos frecuente que antes, lo que puede significar defecar menos de tres veces a la semana, evacúa menos contenido y con más dureza, requiere un esfuerzo para conseguirla o no siente haber evacuado completamente.

Las heces en el estreñimiento tienden a ser duras, secas y difíciles de pasar. Pueden parecer pequeñas y grumosas en lugar de suaves y bien formadas.

El inicio de los síntomas también es un factor importante para evaluar si se trata de un estreñimiento agudo o crónico. El agudo es de corta duración y generalmente se resuelve en unos pocos días o semanas, mientrras que el crónico es una afección a largo plazo que puede persistir durante meses o incluso años.

Otros síntomas que darán información valiosa al médico sobre si se padece o no estreñimiento van a ser la presencia de dolor, no solo en la región abdominal como consecuencia del vaciado incompleto, sino dolor en la región anal, que puede acentuarse si las heces son de mayor dureza. Este hecho conlleva en muchos casos la formación de hemorroides. Y en este contexto puede ser frecuente la presencia de un pequeño sangrado al finalizar la defecación.

Por otro lado, las personas con estreñimiento agudo van a notar un incremento en el perímetro abdominal, a menudo sienten una sensación de plenitud o distensión abdominal, incluso después de evacuar. Y cuando exista una causa obstructiva (tumores, hernias) puede presentar vómitos e inapetencia para la ingesta de alimentos. Además, el estreñimiento a menudo se asocia con la acumulación de gases en el intestino, lo que puede causar hinchazón y malestar abdominal, pero con ausencia de ventoseo.

Si experimentas síntomas de estreñimiento que son persistentes, severos o acompañados de otros síntomas preocupantes, es importante consultar a un profesional de la salud. El estreñimiento a veces puede ser un signo de una afección médica subyacente, como trastornos gastrointestinales, hipotiroidismo o diabetes, por lo que es importante buscar una evaluación médica adecuada para determinar la causa y recibir el tratamiento adecuado si es necesario.

Diagnóstico del estreñimientol diagnóstico del estreñimiento generalmente se basa en la evaluación de los síntomas y la historia clínica del paciente. Además, el médico puede realizar una serie de preguntas sobre la dieta y estilo de vida y la frecuencia de las evacuaciones intestinales, la consistencia de las heces, la presencia de sangre en las heces, el dolor abdominal y otros síntomas relacionados, y solicitar pruebas para determinar la causa del estreñimiento y descartar otras posibles afecciones.

Los datos acompañantes referidos por la persona que sufre estreñimiento van a orientar notablemente hacia el diagnóstico final (dolor, sangrado, vómitos, fiebre). La exploración del médico puede poner de manifiesto alguna masa al palpar el abdomen, y en el tacto rectal (exploración digital del recto) apreciarse presencia o ausencia de heces en este tramo del intestino, pueden palparse heces impactadas (fecaloma) o incluso tumores.

La analítica de sangre puede aportar información en los casos de estreñimiento secundario a trastornos endocrinológicos, metabólicos, deficiencias nutricionales o enfermedades sistémicas que puedan estar provocando el estreñimiento, así como ante la sospecha de tumores, pues la anemia por pérdida de hierro se suele asociar a este problema.

radiografía simple de abdomen ayuda a confirmar la presencia de abundantes heces en todo el colon, pero además permite descartar si la causa es obstructiva mediante la presencia de un intestino delgado inflamado por la obstrucción.

En la actualidad, cuando la sospecha sea de un estreñimiento orgánico, es decir, consecuencia de alguna obstrucción por ejemplo, la colonoscopia ha desbancado al enema opaco que se realizaba anteriormente, ya que permite el diagnóstico y la toma de biopsia en casos de tumores. El TAC puede complementar estos estudios.