Qué es el sen o cassia y principios activos

El sen o cassia, bien a solas, o mucho mejor asociado a otras plantas medicinales con las que se complementa, constituye una de las principales bazas con las que el herbolario experto cuenta para dar solución al problema del estreñimiento. Según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), entre un 12 y un 20% de la población española padece de estreñimiento, sea de manera crónica o puntual. Hay más mujeres afectadas que hombres, y solo un porcentaje muy reducido acude al médico para ponerle remedio. Ir de vientre menos de tres veces por semana empieza a ser una señal preocupante. Los laxantes herbarios, como el sen, son una opción a explorar, aunque es necesario estar bien informados para hacer un consumo prudente.

Cómo es y dónde se encuentra el sen o cassia

El término sen o cassia engloba a diferentes plantas de la familia de las leguminosas, como el sen de la India Cassia angustifolia, originario del subcontinente indio, el sen de Alejandría Cassia senna o Cassia acutifolia, originario del norte de África, y el llamado sen de España Cassia obovata, que no es originario de la península, sino que procede del África intertropical, pero que fue cultivado en nuestro país desde la Edad MediaEstos cultivos aún eran importantes hasta principios del siglo XX en Cataluña y Levante, pero hoy día se han visto reducidos de forma drástica. El sen que hallamos en los herbolarios procede mayoritariamente de La India y del norte de África (Egipto y Sudán). En la época del Egipto de los faraones, se cultivó en el valle del Nilo y en la zona de Nubia, donde se conocía como senaar, vocablo que presumiblemente es el origen de su nombre.

El sen es una mata herbácea de entre 50 y 70 cm de alto, de tallo pubescente y algo viscoso, con las hojas compuestas, de 4 a 8 foliolos sin rabillo, de forma lanceolada u oblonga y flores amarillas, como las del guisante, agrupadas en racimos densos y terminales. Los frutos son legumbres colgantes, planas y comprimidas, de tonos pajizos, ligeramente arqueadas. Florece desde junio en adelante, y con fines medicinales se cosechan los foliolos y los frutos o legumbres.

Principios activos del sen o cassia

En la primera farmacopea publicada en España a principios del siglo XIX, la Farmacopea Matritense, ya se aludía al sen como el mejor laxante en estos términos: “el sen tiene gran virtud purgante, no hay purgante más frecuente, más usado, y más útil”.

Los principios activos que le confieren tal fuerza, y que están presentes de forma desigual en los foliolos y los frutos, son los que te detallamos a continuación:

• Antraquinonas, heterósidos antraquinónicos.
• Glucósidos de diantronas, hasta un 5%. Incluye senósidos A, C-D.
• Flavonoides, kenferol.
• Mucílagos.
• Ácidos málico y tartárico.
• Taninos, en poca cantidad.
• Resinas.

El sen o cassia es el gran recurso laxante y purgante del que disponen los herbolarios. De este modo, puedes encontrar sen como ingrediente en diversos productos farmacéuticos. Se considera también colagogo (provoca la salida de bilis de la vesícula biliar), y también es ligeramente diurético y depurativo.

El sen se comporta como laxante a dosis bajas o moderadas, y como purgante agresivo a dosis altas. Sus componentes bioquímicos, en especial los heterósidos antraquinónicos, inciden directamente sobre el colon, donde, por la acción de los enzimas presentes en la flora bacteriana, excitan las terminaciones nerviosas de la pared intestinal, provocando un aumento de volumen de agua y favoreciendo el peristaltismo intestinal, las contracciones que facilitan la evacuación de la materia fecal.

El sen, por tanto, tiene indicaciones muy específicas, como es fácil deducir, de las que podemos concluir sus diferentes beneficios para la salud:

• El sen está indicado como un laxante potente para mediar en estreñimientos puntuales o repetidos. Favorece una normalización del tránsito intestinal.
• Puede ser una buena solución para conseguir un vaciado intestinal completo, para antes de una exploración de colon o colonoscopia, de una operación quirúrgica, o de una sesión radiográfica.La cassia puede ser útil para tratar el estreñimiento que se produce a veces tras el embarazo. No olvides consultar antes con tu médico.
• Asociado a plantas que potencien su acción, está señalado para tonificar las funciones de la vesícula biliar y el hígado, y para prevenir la aparición de cálculos biliares.
• El sen se comporta como un diurético de efecto moderado, destinado a aliviar la retención de líquidos.
• En ocasiones se había indicado en caso de colon irritable, pero no existe evidencia científica de su eficacia en este punto. 

Precauciones de uso del sen o cassia y contraindicaciones

Por su contenido en antraquinonas el sen o cassia es una planta que, como ocurre con muchos laxantes, debe ser tomada teniendo en cuenta determinadas salvedades. Infórmate bien en tu herbolario de confianza, y consulta con tu médico para mayor seguridad por si pueden existir contraindicaciones o precauciones a tomar en tu caso.

• Lo debes evitar a toda costa si estás embarazada; el sen tiene un ligero efecto oxitócico y puede provocar el parto.
• Igualmente está contraindicado durante toda la lactancia porque puede llegar a traspasar su efecto a la leche materna y ocasionar desarreglos digestivos en el bebé.
• No está recomendado para niños menores de seis años.
• Recuerda ajustarte siempre a las dosis recomendadas (en dosis altas se comporta como purgante), y procura ceñirte a tratamientos que no excedan las dos semanas seguidas.
• El sen está desaconsejado muy expresamente a personas propensas a padecer episodios de diarreas, deposiciones blandas, cólicos, dolor abdominal, etcétera.Evítalo en situaciones de deshidratación, porque podría empeorarla.
• Se debe evitar también en caso de deficiencia de potasio o desequilibrio de electrolitos.
• Está expresamente contraindicado en caso de obstrucción intestinal, colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn, insuficiencia cardíaca y hepática.
• Debe ser evitado en caso de padecer de hemorroides, infecciones urinarias como la cistitis, e infección renal o nefritis.
• El sen puede mostrar interacciones indeseadas con determinados medicamentos como laxantes de síntesis –digoxina y otros–, diuréticos, estrógenos, warfarina, etcétera. Para mayor confianza, consulta con tu médico.
• No te prepares tus propios remedios herbarios con sen o cassia si no estás seguro de su eficacia y de la ausencia de riesgos. Algunas hierbas, como la regaliz o la cola de caballo, combinadas con sen, pueden generar una reducción preocupante de los niveles de potasio.
• Dosis altas de sen pueden provocar, sobre todo en personas alérgicas o proclives a padecer irritación gástrica, cólicos intestinales, diarreas y vómitos.
• Para el tratamiento de estreñimiento crónico los expertos recomiendan recurrir a laxantes menos agresivos que aquellos que contengan esta planta.
• Cómo se toma el sen o cassia: fórmulas herbarias

Puedes encontrar sen o cassia a granel en muchos herbolarios, pero también incorporado en diferentes productos herbarios y dietéticos. Los foliolos, por contener mayor proporción de heterósidos, ejercen una acción laxante y purgante más acusada que los frutos.

El sen o cassia se presta a diferentes formas de presentación:

• En infusión de foliolos y de frutos, de 5 a 20 g por litro de agua, dos tazas al día.
• En polvos para infusión.
• En cápsulas de 100 a 300 mg, de 1 a 4 al día según nivel de necesidad.
• Jarabe a partir de su extracto líquido, entre 10 y 25 g diarios.
• Enema o lavativa a partir de la infusión, unos 15 g, de efectos más contundentes o inmediatos. No la utilices sin contar con supervisión médica.

La dosis de sen recomendada para adultos y niños mayores de 12 años es de 17 mg de antraquinonas diarios, y es preciso no llegar a superar los 34 mg. La dosis correcta es la mínima que ya produce el efecto buscado. El sen suele actuar a las 10-12 horas de su ingesta.

Recuerda que siempre será una solución finalista, cuando una adecuada hidratación y una dieta especialmente rica en fibra no hayan sido suficientes para acabar con el estreñimiento, o cuando otros laxantes más suaves no hayan ofrecido los resultados buscados. Otra solución es combinarla con otras plantas laxantes y demulcentes en dosis ponderadas.

Fórmulas herbarias con sen (cassia)

Te proponemos un par de fórmulas con cassia que puedes pedir en tu herbolario de confianza. El sen tiene un sabor muy amargo, lo que demanda que sea combinado con plantas de gusto más amable, como el hinojo o la menta.

Fórmula de sen para el estreñimiento

Ingredientes:

Frutos de sen, hinojo, malva y raíz de malvavisco.Preparación:

Separas una cucharada sopera rasa de la mezcla a partes iguales por taza de agua. Lo mantienes en reposo durante toda la noche. A la mañana siguiente, cuelas y le añades, como opción, un poco de zumo de limón.Dosis:

Te tomas 2-3 tazas al día, durante un máximo de diez días s

Fórmula de sen para el vaciado intestinal

Ingredientes:

Foliolos de sen, zaragatona, boldo, llantén mayor, frángula, menta y estevia. 20 g por planta.Preparación:

Separas una cucharada sopera rasa de la mezcla por cada taza de agua. Hierves cinco minutos, dejas que repose otros diez, y lo cuelas.Dosis:

Te puedes tomar tres tazas al día desde los seis días antes de la intervención. Acompaña de un consumo muy generoso de agua durante el tratamiento.