Micosis cutáneas
23 septiembre, 2022Las micosis cutáneas son enfermedades producidas por hongos, muy frecuentes en climas cálidos con alta humedad. La piel es un órgano donde se localizan muy frecuentemente las infecciones micóticas en el hombre, las cuales pueden clasificarse en superficiales y profundas.
Cada especie tiende a producir sus propios rasgos clínicos, aunque a menudo varios de ellos ocasionan erupciones idénticas, otras veces son distintas y otras con unas características que permiten la identificación de las especies con sólo examinar al paciente
Los animales domésticos, perros y gatos son los responsables de la transmisión al hombre, así como el agua puede ser reservorio (aloja el germen) de la enfermedad. Vivir en zonas húmedas, como los trópicos, tener una bajada de defensas o haberse sometido a tratamientos quimioterápicos son algunas de las posibles causas del origen de las micosis.
Zonas donde pueden aparecer las micosis
Las micosis pueden localizarse en cualquier parte del cuerpo, afectando al cuero cabelludo, o presentarse como manchas pigmentadas en el resto de la piel.
También pueden ocasionar fisuras interdigitales de las manos y de los pies o zonas inflamadas en las axilas e ingles.
La fuente de contaminación puede provenir de otro ser humano, de un vector animal (gatos, perro, conejos) o puede estar en la tierra.El hongo produce una forma de resistencia denominada espora y puede permanecer meses en un ambiente hasta que se encuentra un lugar propicio donde desarrollarse.
Predisposición a padecer micosis
En cuanto a los factores de riesgo para padecer micosis, en primer lugar, interviene la predisposición individual, ya sean factores genéticos o factores ambientales (directamente relacionados con el hábitat de los hongos).
En segundo lugar, el contacto con el agente infeccioso que produce la enfermedad. El ambiente ideal para la reproducción de estos agentes es cálido y húmedo.
Muchas micosis son afecciones oportunistas que proliferan ante una bajada de las defensas del sistema inmune. Puede ser por varios motivos como:
- Estrés.
- Ansiedad o depresión .
- Enfermos de VIH, diabetes, etcétera.
- Ciertos tratamientos quimioterápicos.
Grupos de riesgo en la micosis
En la genésis de la micosis influyen dos factores de riesgo fundamentales: el ambiental y el ocupacional. En base a estos se encuentran:
- Aquellas personas que debido a su trabajo u otras circunstancias deben mantener constantemente sus manos en el agua y posteriormente no las seca bien.
- Aquellas personas que por circunstancias deben estar con botas u otro tipo de calzado todo el día que no permita la transpiración del pie, favoreciendo la proliferación de hongos. Igualmente, las fibras sintéticas de las medias y ropa interior pueden favorecer el crecimiento de estos agentes.
Las personas de edad avanzada por una bajada de defensas natural propias de esta etapa de la vida.
Infecciones cutáneas micóticas más frecuentes
Hay diversos tipos de infecciones micóticas:
- Dermatofitosis o tiñas.
- Lesiones producidas por dermatofitos, hongos con la particularidad de desarrollarse en la queratina.
La forma de transmisión en ocasiones puede ir asociada con el contacto de animales. Veamos con detalle las más frecuentes:
Tiña de la cabeza
Característica de la edad infantil, la tiña de la cabeza desaparece en la pubertad, aunque puede ocurrir a cualquier edad. Las infecciones son contagiosas y se pueden adquirir por contacto con alguien que la padezca o al tocar objetos contaminados tales como peines, sombreros, etcétera.
La infección también se puede propagar por medio de mascotas, en particular gatos.
Los síntomas abarcan:
- Picazón del cuero cabelludo.
- Áreas de apariencia calva.
- Lesiones del cuero cabelludo redondas y escamosas que pueden estar rojas o hinchadas.
- Incluso manchas negras sobre el cuero cabelludo.
La tiña de la cabeza puede ser extremadamente persistente y puede retornar después del tratamiento. En muchos casos, mejora de manera espontánea cuando la persona llega a la pubertad. No obstantem es recomendable acudir al especialista.
Tiña del cuerpo
Se presenta a cualquier edad. La tiña del cuerpo puede atacar a cualquier área de la piel pero se encuentra en aquellas que están más expuestas como cara y brazos.
Este padecimiento se caracteriza por el prurito intenso y por la aparición de unas lesiones anulares y descamativas.
Tiña de las uñas
Son poco frecuentes en la infancia. Afecta a las uñas de los dedos de la mano o el pie y se caracteriza por el engrosamiento y deformación de la uña. Las uñas de los dedos de los pies suelen verse afectadas con mayor frecuencia que las de las manos por la presencia de placas en forma de anillo, rojas y escamosas, con zonas más claras en el centro.
Pie de atleta
Se trata de una infección fúngica que afecta a los pies. El pie de atleta suele afectar principalmente a los espacios interdigitales, aunque se ha demostrado que en un 40% de los casos el hongo también está presente en la planta y bordes laterales del pie. Provoca un picor intenso entre los dedos de los pies, en especial por la noche, y una sensación de quemazón. A medida que la infección progresa, la piel se reblandece y la zona infectada se inflama, volviéndose sensible al tacto. Poco a poco, los bordes de la zona infectada cogen un color blanquecino y la piel empieza a pelarse. La piel de los pies está muy húmeda y desprende mal olor.
Se pueden formar grietas o fisuras en los pliegues interdigitales que generan mucho picor y pueden ocasionar dolor al andar.
En cuanto al tratamiento del pie de atleta, existen medidas farmacológicas y no farmacológicas. Estas últimas consisten en medidas higiénicas adecuadas, aireación, evitar la humedad y la autocontaminación. Las medidas farmacológicas consisten en antifúngicos tópicos o sistémicos. En cualquier caso, el médico pautará el tratamiento adecuada
Candidiasis
Las candidiasis son infecciones producidas por levaduras del género Candida, que alcanzan piel, uñas y membranas mucosas. No afecta al pelo. La infección puede comprometer casi cualquier superficie de piel en el cuerpo, pero se presenta con mayor frecuencia en áreas cálidas, húmedas y con pliegues como las axilas y la ingle. El hongo que causa más a menudo la candidiasis cutánea es el Candida albicans.
La cándida es la causa más común de dermatitis del pañal en bebés. Los hongos se aprovechan de las condiciones cálidas y húmedas dentro del pañal. La infección por cándida es particularmente común en individuos con diabetes y en personas obesas. Los antibióticos y los anticonceptivos orales (píldoras anticonceptivas) incrementan el riesgo de candidiasis cutánea. La cándida también puede producir infecciones de la uña (onicomicosis) y en las comisuras de la boca.
El tratamiento, generalmente, es tópico. Existe facilidad de aparición de resistencias. Se aplican formas galénicas del tipo loción, a la vez que hay que evitar la humedad persistente y el resto de factores condicionantes como la poca ventilación, vestimenta oclusiva y mala higiene.
Pitiriasis versicolor
La pitiriasis versicolor es una infección superficial de la piel, crónica y normalmente asintomática, producida por una levadura del género Malassezia, especialmente en la pubertad.
Se suele localizar en la parte superior del tórax, espalda, con extensión hacia la raíz de los miembros superiores y cuello. En los lactantes suele ser poco frecuente y tiene la característica de poder localizarse en cara y cuello.
Son pequeñas manchas uniformes, planas, ovaladas, escamosas y confluentes. El color varía en función del paciente y de la exposición al sol. El raspado da lugar a liberación de escamas, con el aspecto de la epidermis sonrosada.
El tratamiento es tópico a no ser que existan casos muy rebeldes, donde el especialista decidirá utilizar tratamientos sistémicos.
Recomendaciones para las micosis cutáneas
Estas son algunas medidas a seguir muy recomendables en caso de que padezcas micosis cutáneas, esas incómodas infecciones en la piel causadas por hongos, que pueden ir desde pie de atleta, a tiña de la cabeza, las uñas o el cuerpo, pasando por pitiriasis versicolor o candidiasis:
- Mantener buenas condiciones higiénicas.
- Tratar la micosis lo antes posible no dejando que se extienda o se complique, al fin y al cabo es una infección y deja una puerta de entrada a posibles microbios. Acudir al especialista cuando se padezcan estas afecciones.
- Si sospechas que sufres micosis no te automediques, busca el consejo de un dermatólogo, ya que un tratamiento erróneo puede dificultar el diagnóstico y empeorar el problema.
- Evitar el calzado muy cerrado sobre todo en épocas de verano.
- Ventilar el pie de forma periódica, manteniendo una buena higiene.
- Evitar calzados de goma.No andes descalzo en zonas húmedas comunitarias, tipo piscinas o gimnasios.
- Después de la ducha diaria, secar bien el cuerpo. Utiliza una toalla específica para los pies.
- No compartir ropa íntima, toallas ni calzado.
- Lavar bien las zonas íntimas tras haber orinado o tenido relaciones sexuales.