Eructos con olor a azufre, causas y soluciones
7 agosto, 2024eructar es un proceso natural y normal del cuerpo para liberar el exceso de gas en el sistema digestivo a través de la boca. Este gas proviene principalmente del aire que tragamos, del consumo de bebidas carbonatadas, o de la fermentación de los alimentos en el estómago y también se expulsa a través de flatulencias. Sin embargo, si se convierte en algo frecuente y molesto conviene consultar con un médico porque podría indicar un problema de salud, como la gastritis. Puede ocurrir, además, que los eructos sean malolientes. Es el caso de lo que se conoce como eructos azufrados o sulfurosos, que tienen un característico olor a azufre o huevo podrido.
Causas de los eructos azufrados o sulfurosos
Este olor tan desagradable se debe a la presencia de sulfuro de hidrógeno (H₂S) en los gases que se expulsan durante el eructo. El sulfuro de hidrógeno es un gas que se produce en el sistema digestivo durante la descomposición de ciertos alimentos por parte de las bacterias intestinales y las principales causas por las que los eructos de una persona pueden tener mal olor son:
Consumo de alimentos ricos en azufre
Ciertos alimentos contienen proteínas ricas en azufre. Es el caso de los huevos, las carnes rojas y de aves, los vegetales crucíferos, como el brócoli, la col, las coles de Bruselas y la coliflor. También el ajo y la cebolla, que son conocidos por su elevado contenido de compuestos sulfurados.
Trastornos digestivos
Los eructos con olor a azufre también pueden ser un signo de la presencia de algunas enfermedades del aparato digestivo como:
- Síndrome del intestino irritable (SII): las personas con colon irritable pueden experimentar una digestión irregular y la producción de gases sulfurados.
- Enfermedad celíaca: la intolerancia al gluten puede llevar a problemas digestivos y producción de gases anómalos.
- Intolerancia a la lactosa: la incapacidad para digerir la lactosa puede provocar la producción de gases sulfurados.
- Infecciones gastrointestinales, como la infección por la bacteria Helicobacter pylori, pueden alterar la digestión y aumentar la producción de gases malolientes.
- Parasitosis intestinales como la giardiasis.
- Gastritis.
- Reflujo gastroesofágico (ERGE).
- El estrés y la ansiedad pueden afectar a tu digestión y provocar gases y eructos malolientes.
Uso de ciertos medicamentos
Los antibióticos pueden alterar el equilibrio de la flora intestinal y facilitar el crecimiento de bacterias productoras de gas sulfurado. Algunos suplementos dietéticos que contienen azufre también pueden contribuir a generar este olor en los eructos.
Hábitos alimenticios
Comer demasiado rápido puede favorecer la ingesta de aire e incrementar la producción de gases. Masticar chicle con frecuencia o abusar de las bebidas carbonatadas también contribuye a la formación de gas en el estómago.
Prevención y tratamiento de los eructos con olor a azufre
Prevenir o tratar las causas modificables de los eructos con olor a azufre es lo más útil para evitar su aparición, como:
- Modificar la dieta y reducir el consumo de alimentos ricos en azufre, así como los ultraprocesados, que incluyen algos niveles de sal, azúcar, o aditivos que pueden intensificar los síntomas digestivos y los eructos azufrados.
- Comer despacio masticando bien los alimentos y no hablar durante las comidas para así disminuir la ingesta de aire.
- Algunas infusiones, como la manzanilla, la melisa, el boldo, el hibisco o el té verde, favorecen la digestión y ayudan a eliminar la halitosis y el mal olor de los eructos.
- Evitar bebidas carbonatadas, que pueden aumentar la producción de gases.
- Tomar probióticos, que ayudan a mantener un equilibrio saludable de bacterias en el intestino.
- Mantenerte bien hidratado bebiendo agua a lo largo del día y evitando la ingesta de alcohol.
- Consultar a un médico si los eructos sulfurosos son persistentes o van acompañados de otros síntomas para descartar infecciones o trastornos digestivos subyacentes, o diagnosticar y tratar correctamente sus causas.