Tome precauciones para evitar la pérdida auditiva

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que 1100 millones de jóvenes (entre 12 y 35 años de edad) están en riesgo de padecer pérdida de audición por su exposición al ruido en contextos recreativos. El uso de dispositivos en un volumen alto va degenerando la capacidad auditiva, aunque la edad es otro factor que va deteriorando esta capacidad.

Expertos estiman que a partir de los 28 años varias personas ya pueden empezar a presentar problemas en la audición. Aunque no son los únicos que se presentan, también se dan de manera congénita u otitis.

La OMS considera como pérdida de audición cuando el umbral en ambos oídos es igual o superior a 25 decibeles. «La pérdida de audición puede ser leve, moderada, grave o profunda. Afecta a uno o ambos oídos y entraña dificultades para oír una conversación o sonidos fuertes».

Estas son varios de los consejos de especialistas para prevenir la pérdida de audición:

Evite la exposición prolongada a ruidos fuertes

Expertos señalan que a mayor ruido, menor tiempo se debe escuchar. Evite lugares donde el volumen de parlantes sobrepasen lo recomendado. Además baje el volumen de su radio o de su teléfono móvil. Si no puede evitar estas situaciones es recomendable que utilice un dispositivo de protección.

Limite el uso de audífonos

La organización Hear It sugiere a las personas que reduzcan el tiempo en el que escuchan música alta, una de las sugerencias que plantea es la regla 60/60 que consiste escuchar 60 minutos al día al 60% de volumen. Además recomienda el uso de auriculares en la oreja y no en el oído.

Precaución con la limpieza

Especialistas señalan que en cuanto a la limpieza esta no puede hacerse con cotonetes bajo ningún concepto, ya que con estos se puede lastimar y permitir el ingreso de bacterias que permita una otitis externa.

La limpieza debe ser en la parte exterior y sobre la cera, esta tiene una función de protección.

Vacunaciones ante otras enfermedades

Si bien no existe una vacuna que evite la pérdida de audición o sordera, los padres pueden ayudar en la protección de sus hijos al suministrarles las dosis respectivas para impedir el desarrollo de enfermedades como sarampión, las paperas, la rubéola y la meningitis.

De acuerdo a la OMS, el 40% de los casos se deben a factores genéticos; el 31% a enfermedades infecciosas, y el 17% a complicaciones perinatales, en particular la prematuridad, el bajo peso al nacer y la ictericia neonatal. Asimismo, se estima que el 4% de los casos de pérdida de audición en la niñez se debe a la administración de medicamentos ototóxicos a embarazadas y recién nacidos.

Alimentación adecuada

Aunque parezca que no existe una relación, varios especialistas relacionan el consumo de alimentos con alto contenido en azúcar y bebidas alcohólicas con la pérdida auditiva. (I)