Escarlatina, una antigua enfermedad, ¿de vuelta?

Escarlatina, una antigua enfermedad, ¿de vuelta?

24 febrero, 2023 0 Por dropharma_admin

La escarlatina, una infección propia de la infancia que se asocia a siglos anteriores, aún es muy frecuente y repunta en el 2023. Conoce sus síntomas, ya que un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado son claves para evitar complicaciones.La escarlatina es una infección típica de la infancia, especialmente en los niños mayores de seis años, producida por una bacteria llamada estreptococo, en concreto el estreptococo beta-hemolítico del grupo A (SBHA) también llamado estreptococo pyogenes. Este germen produce habitualmente amigdalitis (infección de la garganta) en los niños, pero algunos tipos producen además una sustancia (llamada toxina eritrogénica), que al pasar a la sangre da lugar a los signos clínicos propios de la escarlatina.

El estreptococo A es la causa más frecuente de anginas en los niños (las típicas anginas con pus), pero esto no quiere decir que todos los niños con anginas vayan a tener escarlatina. En primer lugar, no todos los tipos de estreptococo producen la toxina y, además, no todos los niños son sensibles a ella.

La escarlatina no es una enfermedad antigua; siempre han existido casos, y actualmente los sigue habiendo, y su diagnóstico es muy frecuente en los servicios de urgencias de pediatría de cualquier hospital. Lo que sí que ha cambiado es su tratamiento, ya que actualmente existe un amplio abanico de antibióticos, que administrados precozmente frenan la progresión de la enfermedad. En la época previa a los antibióticos sí que podía ser una enfermedad potencialmente grave, como se muestra en algunas películas, pero en la actualidad se tratan con el mismo antibiótico que las amigdalitis,

Aumento de casos de escarlatina desde mediados de 2022

De hecho, desde finales de 2022, tal y como reflejó la OMS en un aviso reciente, al menos cinco estados europeos (FranciaIrlanda, los Países Bajos, Suecia y el Reino Unido) habían notificado un aumento de los casos de enfermedad por infección invasiva por estreptococos del grupo A y, en algunos casos, también de escarlatina. En algunos de estos países también se ha notificado un aumento de las muertes relacionadas con infecciones invasivas por estreptococos del grupo A, siendo los niños menores de 10 años el grupo más afectado. A mediados de febrero de 2023, las autoridades británicas han vuelto a señalar un repunte poco usual de los casos de escarlatina, con más de 4600 afectados en las últimas nueve semanas.

En España, comunidades como Aragón, Galicia o Sevilla han notificado más casos de lo esperable. Desde la SEIP (Sociedad Española de Infectología Pediátrica) tan han advertido de que «en nuestro país se están analizando los casos de iGAS en las últimas semanas y meses, pero se conoce el fallecimiento de algunos niños y un número que parece inusualmente elevado de casos graves, que podrían hacer pensar que estamos sufriendotambién un aumento en su incidencia. En algunos niños podría ser una sobreinfección de una infección respiratoria viral, como VRS o gripe».

de forma oral, y sin requerir ingreso hospitalario.

Síntomas de la escarlatina

Los síntomas de la escarlatina generalmente aparecen entre 1 y 2 días después de la exposición a la bacteria Streptococcus pyogenes, también conocida como estreptococo del grupo A. La escarlatina se manifiesta clínicamente en dos fases:

  • Fase inicial o pródromos: se inicia como un cuadro de amigdalitis típico, con fiebre muy elevada de inicio brusco (de hasta 40º), dolor de garganta intenso, dolor de cabeza y, ocasionalmente, náuseas y vómitos. También puede aparecer dolor abdominal y sensación de cansancio generalizado. Es importante matizar que no todos los pacientes con escarlatina presentan todos estos síntomas, y algunos afectados pueden tener síntomas leves o no presentar ningún síntoma en absoluto.
  • Fase de sarpullido o exantema: el sarpullido que aparece en la piel es lo más característico de la escarlatina.

Se trata de una erupción rojiza, color escarlata (de ahí el nombre de escarlatina), que se inicia en el cuello y la cara, y posteriormente va descendiendo al resto del cuerpo. Inicialmente es una erupción que recuerda a una quemadura solar, con la piel roja y encendida, que se clarea a la presión. Al tacto, la piel es rugosa, con pequeños granitos, como si fuera papel de lija muy rasposo. Además, el sarpullido de la escarlatina tiene como característica que afecta a los pliegues (por ejemplo en el pliegue del codo, detrás de las rodillas, o en las axilas), dando lugar a unas líneas rojas que se llaman líneas de pastia.

Es muy típico también que este sarpullido no afecte al triángulo que se forma entre boca y nariz, dando lugar a una expresión facial típica que llamamos facies de Filatov.

Este sarpullido empieza a desaparecer tras 4-6 días, y es muy frecuente que la piel se descame, como si fuera una quemadura. Esta descamación puede durar hasta 6-8 semanas.

Además del sarpullido de la escarlatina, es muy habitual que la lengua esté muy roja y las papilas marcadas (lengua en fresa). Los labios también suelen estar enrojecidos y pueden descamarse, como la piel. Los ganglios del cuello estarán también aumentados de tamaño y sensibles a la palpación. 

Complicaciones de la escarlatina

La escarlatina en la mayoría de las ocasiones es una infección banal que se resuelve al iniciar el tratamiento con antibiótico. No obstante, hay dos posibles complicaciones que, afortunadamente, son muy poco frecuentes:

  • Fiebre reumática: tras una infección por el estreptococo A se liberan componentes del germen parecidos a los tejidos humanos, y se inicia entonces un proceso autoinmune, en el que el cuerpo responde creando anticuerpos frente a la bacteria, que pueden destruir también las propias células. Esto puede ocurrir semanas o meses después de haber pasado la escarlatina.

No existe ninguna prueba de laboratorio que diagnostique la enfermedad, sino que el diagnóstico se establece por los signos clínicos: nódulos cutáneos, inflamación de las articulaciones (artritis), inflamación cardíaca (carditis). La fiebre reumática se conoce popularmente como velocidad en la sangre, pero en la actualidad es muy infrecuente (10 casos por cada 100.000).

  • Glomerulonefritis: es una inflamación del riñón que da lugar a la aparición de orinas oscuras (con sangre), hipertensión arterial, y pérdida de proteínas por la orina, lo cual puede causar edemas. Es también muy poco frecuente, y casi siempre se cura sin secuelas.

En cualquier caso, además de los antibióticos, se pueden tomar algunas medidas para aliviar los síntomas de la escarlatina en los niños:

  • Tomar analgésicos y antipiréticos para aliviar el dolor y reducir la fiebre.
  • Beber líquidos para prevenir la deshidratación.
  • Hacer gárgaras con agua tibia y sal para aliviar el dolor de garganta.Descansar lo suficiente para ayudar al cuerpo a combatir la infección.
  • Evitar el contacto cercano con otras personas para prevenir la propagación de la infección.