Encuentran nuevos beneficios de las algas rojas para la salud

Encuentran nuevos beneficios de las algas rojas para la salud

3 agosto, 2021 0 Por dropharma_admin

Las algas rojas, un alimento habitual en la dieta de los asiáticos, favorecen el crecimiento de bacterias probióticas en el intestino que son beneficiosas para la salud y podrían proteger contra el cáncer de colon, según un estudio.

as algas son un alimento muy popular en la cocina asiática al que se le atribuyen numerosas propiedades beneficiosas para la salud. De hecho, los resultados de algunos estudios muestran que los asiáticos que consumen algas regularmente tienen menos riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer como el de colon, el colorrectal o el de mama, aunque hasta ahora se desconocía qué componente de las algas ejercía este efecto protector anticancerígeno.

Ahora, una nueva investigación que se ha publicado en Marine Drugs ha comprobado que las algas rojas –un producto habitual en la dieta de la población asiática a lo largo de miles de años– aportan beneficios a la salud; en concreto, que su consumo favorece el crecimiento de bacterias probiógicas saludables en el intestino y puede ayudar a prevenir el cáncer de colon.En el pasado, la gente se preguntaba por qué el número de pacientes con cáncer de colon en Japón es el más bajo del mundo”, ha declarado Yong-Su Jin profesor de microbiología alimentaria, que añade: “Muchos asumieron que se debía a algún aspecto de la dieta o el estilo de vida japonés. Queríamos preguntarnos si su dieta de algas marinas estaba relacionada con la menor frecuencia de cáncer de colon”.

Comer algas favorece el crecimiento de bacterias probióticas

Los autores del trabajo estudiaron la estructura de distintos tipos de algas rojas empleando enzimas y probaron los azúcares que se producían con el objetivo de determinar cuál de ellos tenía propiedades saludables. De los seis azúcares diferentes que se produjeron los más prometedores fueron la agarotriosa y la 3,6-anhidro-L-galactosa, o AHG.

“Después de producir estos azúcares, probamos su actividad prebiótica utilizando la bacteria Bifidobacterium longum ssp. Infantis”, ha explicado Eun Ju Yun, ex investigadora postdoctoral en el Instituto Carl R. Woese de Biología Genómica. B. infantis es una bacteria probiótica que se encuentra en el intestino de los bebés y resulta beneficiosa para la salud. Entre los azúcares que se derivan de las algas, las bacterias solo pueden consumir agarotriosa, y esto significa que funciona como un prebiótico, es decir, que favorece el crecimiento de bacterias probióticas.“También probamos otra cepa, B. kashiwanohense, y descubrimos que también consumía agarotriosa», ha añadido Yong-Su Jin, profesor de microbiología alimentaria. “Estos resultados nos muestran que cuando comemos algas rojas se descomponen en el intestino y liberan estos azúcares, que sirven como alimento para las bacterias probióticas. Podría ayudar a explicar por qué las poblaciones japonesas son más saludables en comparación con otras”.

Los científicos decidieron probar si los azúcares tenían alguna actividad anticancerígena. “Descubrimos que AHG inhibe específicamente el crecimiento de células de cáncer de colon humano y no afecta el crecimiento de células normales”, dijo Yun. Esta actividad anticancerígena está vinculada a la capacidad de AHG para desencadenar muerte celular (apoptosis).

“Hay mucha información sobre cómo las algas rojas son degradadas por microorganismos en el océano y en el cuerpo humano”, dijo Kyoung Heon Kim, profesor de biotecnología y co-asesor del artículo, que asegura que su “trabajo explica por qué las algas rojas son beneficiosas al proporcionar el mecanismo molecular. Continuaremos estudiando su función en modelos animales y esperamos poder utilizarlas como agente terapéutico en el futuro”.